Enteramente sencilla
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| Imagen Manu Cueva |
Acompañada por la sencilla vibración
de sus palabras
En su regazo del cielo
Y su antiguo carmín el de su anhelo
Ahogando la calma de su desvelo
Por la enfermedad sin remedio
Ahora su madre tendida en la cama
Otro anochecer prisionero
Madre e hija en el filo de la árida despedida
Arañando sentimientos
Dame los últimos cuidados
Pero no me atrapes sin…
Tus recuerdos por última vez
Intenta vivir, dime esto madre por última vez
Hija, amiga de mi ser prendida
Cuida y lo siento que por mi despedida
Ya no hay vida para ti que yo no quisiera que maldigas
Intenta disfrutar…
Aún en la pobreza, te aseguro
Que habrá ratos de paz
Cuida de tu padre el hombre con quien viví encadenada…
A su cintura y a la tuya
Huye del miedo, que mata
Sola no estas
Más que tierna niña ven abrázame
A recordar por última vez
Tu recién nacida piel
Y el último beso sonó
Y él hasta siempre jamás llegó
En la memoria no partió
Pero ella se despidió
En su febril enfermedad
Alguna clase de hueco dejó
Pero ella la recordó
Poesía Manu Cueva.
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