Fobia.

Como todo hijo de vecino, hay gente que parece nacer con fobias y temores… En esta historia nuestro protagonista sufre varias, como miedo a la soledad, miedo a estar con gente y miedo a los espacios abiertos, tanto como a los espacios cerrados… Pero por algún motivo sigue viviendo.

Medico: ¿Cómo estás Johnny?

Johnny: ¿Puedo hablar con franqueza sin miedo a represalias?

Medico: Claro que si Johnny, estas en el médico, aquí no tienes que temer nada… Solo intento ayudarte.

Johnny: Verás no es por llevarte la contraria de alguna manera se que necesito venir pero no…

Medico: No te alteres… Si no te encuentras a gusto conmigo quizá pueda derivarte a otro médico, pero tu cuadro clínico es muy severo eres como un gran manojo de fobias concentrado y si no me hablas no puedo prescribirte nada así como aconsejarte buenas terapias que quizá te ayuden.

Johnny: No me fio doctor con todos mis respetos hacia usted pero tengo la sensación de que no me va a ayudar en nada… De hecho me gustaría irme en cuanto pueda de esta cita.

Médico: Tu familia y amigos están muy preocupados por varios motivos… Saben que sufres mucho pero ellos no hacen otra cosa que querer intentar ayudarte de alguna manera a que no eches por la borda tanto trabajo, esto es un trabajo muy especial y delicado que debes de llevar muy bien por que por eso lo hacemos para que nada te perjudique y puedas hacer una vida normal.

Johnny: ¡Es que mi vida no es normal Doctor! ¡No entiende mi problema en absoluto!

Médico: Ahora veo lo que te pasa, el temor que tienes hacia todo, viene de algún trauma infantil… No te preocupes es algo normal y le pasa a mucha gente no solamente a ti.

Johnny: Tengo que irme ahora mismo…

Médico: Pero ¿A dónde vas a ir? Si todo te da miedo ¿Cómo vas a sobrevivir ahí fuera?

No lo entiendes, necesitas un hábitat como se diría en los documentales de naturaleza para que puedas vivir, con gente y no te podrás deshacer de la gente y al mismo tiempo tienes miedo de ti mismo, cuando te quedas solo ¿Qué vas a hacer? La única opción de que alguien pueda ayudarte está en este centro, tienes que aprender a confiar en nosotros.

Narrador: En ese momento un fuerte enfermero lo agarra por los brazos, mientras Johnny muerde y patalea sin cesar… Al mismo tiempo una enfermera le inyecta una dosis de sedante intravenoso en el brazo derecho, aunque con el forcejeo la aguja se rompe dentro de su brazo, mientras Johnny se va quedando dormido.

Médico: Lo siento Johnny pero tienes que dormir y descansar el planeta no se va a arreglar ni tus traumas tampoco… Así que hemos decidido ingresarte un tiempo en el Hospital.

Narrador: La cara de Johnny es un mapa y en sus dientes hay sangre del brazo del enfermero pero por un gemido medio gutural, el médico cree percibir que Johnny ha entendido el mensaje que le ha dado.

Texto manu cueva, espero sea de agrado.